Diferencias entre canal ético y canal de denuncias: ¿son lo mismo con nombres diferentes? Desde un punto de vista estricto: sí, pero hay matices que explicamos a continuación. Sigue leyendo para aprender a diferenciarlos.
En el ámbito empresarial y organizacional de España, los términos “canal ético” y “canal de denuncias” se han vuelto cada vez más relevantes. Estos mecanismos son fundamentales para mantener un entorno laboral transparente, justo y conforme a la legalidad. A través de este artículo, se explorará en detalle qué son estos canales, su importancia, funcionamiento, y la legislación que los respalda en España.
Ley Canal Ético
Un canal ético es una herramienta implementada por organizaciones para permitir que empleados y, en algunos casos, terceros (como clientes o proveedores), reporten de manera confidencial y, si así lo desean, anónima, conductas que consideren inapropiadas o contrarias a los principios éticos de la empresa. Esto incluye, pero no se limita a, casos de corrupción, acoso, discriminación o incumplimiento de normativas internas.
Ley Canal de Denuncias
Por otro lado, el canal de denuncias se enfoca más en la recepción de quejas o denuncias sobre actividades ilícitas o no éticas dentro de la organización. A diferencia del canal ético, que puede incluir aspectos más amplios de comportamiento y ética empresarial, el canal de denuncias está más orientado a aspectos legales y de cumplimiento.
Importancia y Beneficios
Fomento de una Cultura de Transparencia
Estos canales son esenciales para promover una cultura de honestidad y transparencia dentro de las organizaciones. Permiten identificar y resolver problemas internos antes de que escalen, salvaguardando así la integridad de la empresa y sus empleados.
Prevención de Riesgos Legales y Reputacionales
Además, ayudan a prevenir riesgos legales y daños a la reputación de la empresa, al asegurar que las actividades se realicen dentro del marco de la ley y las buenas prácticas empresariales.
Legislación y Normativa en España
Leyes Aplicables
En España, la legislación referente a los canales de denuncia y éticos ha evolucionado, siendo parte del compromiso del país con la transparencia y la lucha contra la corrupción. La Ley Orgánica de Protección de Datos y Garantía de los Derechos Digitales (LOPDGDD) es un ejemplo clave que regula estos canales, especialmente en lo que respecta a la protección de datos de los denunciantes.
Directrices de la UE
La Directiva (UE) 2019/1937 de la Unión Europea es una normativa clave que establece un marco legal para la protección de las personas que denuncian infracciones del Derecho de la Unión, conocidos como “denunciantes”. Esta directiva responde a la necesidad de fortalecer la transparencia y la lucha contra la corrupción en los Estados miembros.
Una de sus principales directrices es la obligación para los Estados miembros de asegurar canales seguros para que los denunciantes puedan informar sobre posibles infracciones. Estos canales deben garantizar la confidencialidad de la identidad del denunciante, ofreciendo protección contra represalias, discriminación o cualquier otra forma de trato injusto que pudiera surgir como consecuencia de sus denuncias.
La directiva también establece la necesidad de proporcionar claridad y accesibilidad en los procedimientos de denuncia, tanto en entidades privadas como públicas. Se enfatiza la importancia de realizar investigaciones oportunas y efectivas sobre las denuncias presentadas.
Por último, la Directiva (UE) 2019/1937 enfatiza la importancia de la sensibilización y la formación en las organizaciones, promoviendo una cultura que respalde y aliente a los denunciantes en su labor de contribuir a un entorno más ético y legalmente responsable.
Funcionamiento y Características
Confidencialidad y Anonimato
Una característica crucial de estos canales es la garantía de confidencialidad y, en muchos casos, la posibilidad de realizar denuncias de forma anónima. Esto es vital para proteger a los denunciantes de posibles represalias.
Proceso de Gestión de Denuncias
El proceso típicamente comienza con la recepción de la denuncia, seguido por una evaluación preliminar para determinar su validez. Posteriormente, se realiza una investigación más profunda si es necesario, y finalmente, se toman las medidas correctivas pertinentes.
Retos y Consideraciones
Garantizar la Efectividad
Uno de los principales retos es asegurar la efectividad de estos canales. Esto implica no solo su correcta implementación, sino también fomentar una cultura organizacional donde los empleados confíen y utilicen estos medios.
Protección del Denunciante
Otro aspecto crucial es la protección del denunciante. Las empresas deben garantizar que no se produzcan represalias contra quienes realicen denuncias de buena fe.
Normativa del Canal de Denuncias en España
La normativa que regula los canales de denuncias en España constituye un elemento fundamental para garantizar la transparencia y la legalidad dentro de las organizaciones. Este texto se enfocará en detallar los aspectos legales y regulatorios que rigen los canales de denuncias en el contexto empresarial español.
1. Marco Legal y Regulatorio
La normativa de los canales de denuncias en España se enmarca principalmente en dos ámbitos: la legislación nacional y las directrices de la Unión Europea. A nivel nacional, la Ley Orgánica de Protección de Datos y Garantía de los Derechos Digitales (LOPDGDD) juega un papel crucial. Esta ley no solo protege los datos personales en general, sino que también establece directrices específicas para la protección de los datos de los denunciantes, asegurando su confidencialidad y, en muchos casos, permitiendo el anonimato.
2. Directiva Europea de Protección de Denunciantes
A nivel europeo, España se adhiere a la Directiva (UE) 2019/1937. Esta directiva, conocida como la Directiva de Protección de los Denunciantes, establece un marco legal para la protección de las personas que informan sobre infracciones del Derecho de la Unión. Bajo esta directiva, se obliga a los Estados miembros a garantizar que los denunciantes de irregularidades estén protegidos contra represalias y se establecen canales seguros tanto dentro de las organizaciones como en las autoridades públicas para la presentación de informes.
3. Implementación de Canales de Denuncias
La normativa exige que las empresas implementen canales de denuncias que sean accesibles y fáciles de usar. Estos canales deben garantizar la confidencialidad de la identidad de los denunciantes y ofrecer la opción de realizar denuncias anónimas. Además, las empresas deben establecer procedimientos claros y efectivos para el seguimiento de las denuncias recibidas, incluyendo la evaluación inicial, la investigación adecuada y, si es necesario, la adopción de medidas correctivas.
4. Protección del Denunciante
Uno de los aspectos más importantes de la normativa es la protección del denunciante. Las empresas deben asegurarse de que no se produzcan represalias contra los empleados u otras partes que realicen denuncias de buena fe. Esto incluye protección contra despidos, degradaciones, discriminación o cualquier otra forma de trato injusto.
5. Obligaciones de las Empresas
Las empresas no solo están obligadas a establecer estos canales, sino también a informar y formar a sus empleados sobre la existencia y uso de los mismos. Deben promover una cultura corporativa que fomente la comunicación abierta y la denuncia de irregularidades.
La normativa del canal de denuncias en España, fortalecida tanto por leyes nacionales como por directivas europeas, representa un paso significativo hacia la creación de entornos laborales más éticos y transparentes. Su correcta implementación y seguimiento son clave para fomentar la confianza y la integridad en el ámbito empresarial, garantizando que las actividades se realicen dentro del marco de la legalidad y las buenas prácticas.
¿Canal ético o de denuncias?
De entrada, la diferencia está solo en el nombre. Su finalidad, en ambos casos, es ser un canal de comunicación confidencial desde donde informar sobre malas prácticas e infracciones detectadas en el seno de la empresa. Este canal es interno, es decir, las denuncias las recibe un miembro o departamento de la propia empresa, que se compromete a respetar el anonimato del denunciante y resolver el caso de forma interna. Por tanto, no implica a ninguna autoridad ni entidad pública como pasaría en el caso de interponer una hoja de reclamación.
Hasta ahora estos canales de comunicación eran propios de las empresas con un plan de Compliance (también conocido como plan de Prevención de Riesgos Penales). Como parte del Compliance, se implanta un canal de comunicación interno para alertar sobre malas prácticas y delitos cometidos durante la actividad empresarial. Como hemos destacado, este canal es interno, y generalmente es accesible desde un portal del empleado o similar. Como el Compliance es un protocolo de buenas prácticas dirigido a los miembros de la empresa, su canal de comunicación de infracciones también lo es.
A este canal de comunicación tradicionalmente se le ha llamado canal ético, aunque el nombre depende de cada organización. El término proviene del inglés whistleblowing channel, que se traduce literalmente como “canal de chivatazos”. Esto, para muchas empresas, tenía connotaciones negativas o disuasorias, y por eso se popularizó el término canal ético.
Por lo general, hasta ahora se usaba más el término ‘canal ético’ porque ‘ley canal de denuncias’ tenía connotaciones negativas.
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Con la Directiva UE 2019/1937, se populariza el término canal de denuncias
Con la reciente entrada en vigor de la Directiva de la Unión Europea 2019/1937, tener un canal de comunicación de este tipo se vuelve obligatorio para todas las empresas con más de 50 trabajadores a partir del 17 de diciembre de 2021.
En dicha directiva se usa el término canal de denuncias, y de ahí empieza ganar popularidad por delante de canal ético.
Pero a lo que hay que prestar atención y la única diferencia con el canal ético que conocíamos hasta ahora es a quién da cobertura la directiva europea:
¿A quién da cobertura la Directiva UE 2019/1937? |
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¿Tu canal ético es público o interno? Ahí está la diferencia
El canal de comunicación obligatorio al que se refiere la directiva europea debe ser una herramienta de acceso público, disponible para cualquier persona mínimamente relacionada con la empresa, aunque no forme parte de esta.
En conclusión, si tu empresa tiene un canal de denuncias interno para tus trabajadores, lo llames como lo llames, éste no cumple con la nueva normativa y hay que adaptarlo para que sea accesible a todo el público (siempre y cuando tu empresa esté obligada por la directiva). Aquí te explicamos para qué empresas es obligatorio.
Para terminar, es muy recomendable que tu canal dé la opción de ser 100% anónimo. Esto significa que el denunciante pueda hacer el seguimiento de su denuncia mediante un código de seguimiento, evitando así proporcionar cualquier dato de contacto. En nuestra publicación anterior te explicamos el por qué.
Si estás buscando un software canal ético para cumplir con la Directiva UE 2019/1937, asegúrate que sea un canal de acceso público y anónimo como el de Edorteam.
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¡Creo que un canal ético promueve la confianza interna, mientras que uno de denuncias puede generar desconfianza! 🤔
¿Realmente es efectivo un canal ético o solo es una fachada corporativa? 🤔
¿Realmente la ética se puede regular con leyes? ¿Qué opinan ustedes? 🤔
¡Claro que sí! Las leyes son fundamentales para establecer límites y normas en una sociedad. Sin regulaciones, la ética quedaría al libre albedrío de cada individuo, lo cual puede llevar a abusos y conflictos. Las leyes son necesarias para garantizar un comportamiento ético y justo para todos.